¿Volveremos a aquella normalidad que tanto añoramos ahora, y que antes tanto nos agobiaba?
¿Volveremos a abrazarnos, cuando antes nos costaba tender una mano, y hasta cambiábamos de rumbo para evitar un saludo?
¿Seremos capaces de mirar a nuestros semejantes como a seres humanos, o los volveremos a ver como siempre los vimos… indios, negros, cholos, longos, chinos, ricos, pobretones, feos, maricas?… y cuántos otros calificativos peores.
¿Empezaremos a ver a las personas como fuentes probables de contaminación?
¿Seremos capaces de seguir practicando algo de la actual y obligada solidaridad, que tanto nos ha servido a muchos para mantenernos aislados?
¿Aprenderemos que la convivencia va más allá de las apariencias?
¿Aprenderemos que somos muy frágiles, que cualquier microorganismo podría acabar con nuestras vidas en pocos días y que el universo no nos pertenece?
¿Aprenderemos a aprender?
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Mayo/2020
mi ventana al mundo 
Desaprender es el reto, tomar conciencia…y aprender a aprender…buen tema Fernando
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A los tiempos Elsi!!!
Excelente y preciso tu comentario.
Gracias y un abrazo.
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Ahora más que nunca tenemos que seguir aprendiendo. Chévere tema y bien tratado
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Gracias Santiago.
Un abrazo.
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Las preguntas hay que hacerlas en primer persona de singular.
Ahí encontraras las respuestas.
Muy interesante tu cuestionamiento Fernando
un abrazo
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Aún en ese plano muy personal, ¿seremos capaces de encontrar respuestas y, sobre todo, de actuar en consecuencia?
Gracias y un abrazo
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Creo que no aprendimos nada, talvés y a lo mejor con extrema debilidad que solos no saldremos nunca, sin otra alternativa «juntos», seguiremos siendo excluyentes, clasistas y racistas y no te quepa la menor duda que la permanencia del covid 19, le echaremos la culpa a los del sur, somos horriblemente despreciables, un saludo especial para ti Fernando Tobar.
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Estimado Augusto ha sido una sorpresa leer tu comentario.
Preciso, un poco sombrío y muy verdadero.
Te agradezco por eso y ojalá pueda contar contigo entre mis lectores habituales.
Un abrazo.
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